Mientras 2013 está concluyendo, alabamos a Dios por Su fidelidad en ayudarnos a seguir publicando ¡Proclamación! A veces nos preguntamos si vamos a tener los recursos económicos para pagar a la imprenta y los gastos de correo que se necesitan para cumplir el trabajo, pero Dios ha provisto.
Aunque (obviamente) hemos podido enviar esta cuarta edición de este año, todavía estamos atrasados con el pago de algunas de nuestras cuentas. Pedimos que ustedes se unan con nosotros para orar que Dios provea. Él sabe a quiénes está bendiciendo para que nos ayuden; únase con nosotros para agradecer a Dios por Su fidelidad, tanto en el pasado como el futuro.
Agradecemos a Dios el privilegio de declarar el evangelio y las maravillas del nuevo pacto. Muchas gracias a todos que comparten el ministerio con nosotros mediante la oración y el apoyo económico.
¡Oramos que Dios sea glorificado por medio de ¡Proclamación!, y por medio de cada uno de nosotros que ha sido liberado y avivado por la sangre de Su cruz!