Históricamente, la mayoría de comentarios bíblicos contestan la pregunta de 8:13 con sencillez

10Creció hasta alcanzar al ejército de los cielos, derribó algunas estrellas y las pisoteó, 11y aun llegó a sentirse más importante que el jefe del ejército de los cielos. Por causa de él se eliminó el sacrificio diario y se profanó el santuario. 12Por la rebeldía de nuestro pueblo, su ejército echó por tierra la verdad y quitó el sacrificio diario. En fin, ese cuerno hizo y deshizo. 13Escuché entonces que uno de los santos hablaba, y que otro le preguntaba: «¿Cuánto más va a durar esta visión del sacrificio diario, de la rebeldía desoladora, de la entrega del santuario y de la humillación del ejército?» 14Y aquel santo me dijo: «Va a tardar dos mil trescientos días con sus noches. Después de eso, se purificará el santuario» (Daniel 8:10-14).

 Un ángel hace una pregunta en Daniel 8:13 y los adventistas tratan de explicar la respuesta dada en 8:14 de esta manera: en 1844, Jesús abrió los libros del cielo, los que contenían los nombres y las hazañas de todos los que profesaron la fe, y empezó a juzgar o investigar, sólo a los profesos creyentes. Este juicio es para determinar quién es digno de ser salvo y ser re-animado de la aniquilación del «sueño del alma».

Cinco errores en la doctrina adventista

 Son por lo menos cinco errores gramáticos y contextuales en la doctrina adventista que hacen irrelevante e incorrecta su explicación de Daniel 8:14.

Primero: En vez de contestar la pregunta sobre cuánto tiempo pasaría hasta que la visión de 8:8-12 terminaría, los adventistas proclaman su tesis sobre cuando Jesucristo empieza a limpiar el santuario celestial e ignora la pregunta sobre la visión.

Segundo: En vez de decir cuando el sacrificio diario de 8:11 sería restablecido, la respuesta adventista dice cuándo la fase final del ministerio de Jesucristo va a empezar en el cielo (aunque en realidad, Jesús ha continuado un ministerio en el cielo desde Su ascensión). El adventismo no habla de la cuestión del sacrificio diario.

Tercero: En vez de decir cuándo el cuerno pequeño de 8:10-12 va a dejar de perseguir a los santos, la respuesta adventista habla sobre cuándo Jesucristo va a empezar a borrar los pecados de los santos. Es más, los adventistas dicen que estos pecados han causado la desolación del santuario celestial desde el primer pecado de Adán. En vez de ser un juicio del cuerno pequeño, el juicio investigativo es un juicio de los profesados creyentes.

Cuarto: En vez de contestar la pregunta sobre cuándo el santuario será limpiado finalmente de la profanación hecho por el cuerno pequeño en 8:10-12, los adventistas proclaman cuándo Jesucristo se trasladaría de un salón a otro en el santuario celestial y finalmente empezaría a limpiar el Lugar Santísimo. Otra vez, en vez de limpiar el santuario de su desolación hecha por el cuerno pequeño, el adventismo requiere la limpieza del cielo de los pecados del mismo pueblo de Dios.

Quinto: En vez de decir cuando el ejército (el pueblo de Dios) dejará de ser perseguido por el cuerno pequeño, los adventistas proclaman que la desolación del santuario celestial fue por culpa de los pecados confesados del ejército.

Por consiguiente, por increíble que parezca, ¡uno tiene que concluir que la respuesta adventista de 8:14 de la pregunta de 8:13 no tiene nada que ver con el contexto de 8:8-12!

Históricamente, la mayoría de comentarios bíblicos contestan la pregunta de 8:13 con sencillez: Después de los 2.300 días sacrificiales y literales [o sacrificios, véase «Antíoco IV Epífanes: ¿Es él el cuerno pequeño?», ¡Proclamación!, Primavera, 2014], en 164 a. C. los judíos ganaron su guerra civil contra Antíoco IV, restablecieron el santuario y ganaron su independencia por primera vez desde 586 a. C. ¡Qué evento histórico tan importante! El templo judío en Jerusalén fue limpiado, restablecido o dedicado de nuevo para resumir los sacrificios diarios. Hoy en día todavía se celebra este restablecimiento durante el día santo de los judíos, llamado kellyHanukkah, lo que significa dedicación. También, fue una limpieza normal y no la limpieza para el Día de Expiación.

(Este artículo es un extracto del libro de Kelly, Exposing Seventh-day Adventism, y está disponible en muchas librerías internet).


Russell Kelly era pastor adventista en North Dakota y South Carolina antes de separarse del adventismo en 1982. Recibió el doctorado en Teología en 2001 y ha escrito tres libros. Russ es jubilado, y vive en Washington, Georgia.