Loma Linda: ministerio de sanación ¿de Jesús o del adventismo?
La Universidad de Loma Linda (ULL) es el centro adventista emblemático para la capacitación en las ciencias de salud. Tiene cinco escuelas: las profesiones afines de la salud, la salud del comportamiento, la odontología, la medicina, la enfermería, la farmacia, la salud pública, y la religión.
La misión de ULL es «hacer avanzar el ministerio de sanación y la enseñanza de Jesucristo para “hacer sano al hombre”». El fundamento de este ministerio de sanación es su «mensaje de salud» particular, lo que involucra el vegetarianismo, la abstinencia de té, café, y alcohol, y un estilo de vida saludable que incluye el ejercicio y las técnicas de relajación, y el énfasis en el reposo y el šabbat del séptimo día.
Por ejemplo, al momento de escribir este texto, el Drayson Center de ULL tiene una página en Facebook con una foto de cronograma, publicado el 20 de febrero de 2015, que muestra tres mujeres en la pose balasana, o la posición de reposo (note la foto en la parte superior de la página). Esta cita de James E. Faust está superpuesta sobre la foto:
«La observancia del šabbat como día santo es mucho más que simplemente el reposo físico. Involucra la renovación espiritual y la adoración».
Es interesante saber que Faust era apóstol mormón, y una autoridad general de la iglesia mormona antes de su muerte en 1995.
Loma Linda enseña explícitamente a los alumnos y a los pacientes ese énfasis en la dieta ascética y las prácticas saludables, como medio para tratar o prevenir las enfermedades y alargar la vida. Al mismo tiempo, los que viven inmersos en el adventismo creen que estas prácticas son el medio para profundizar la experiencia y la percepción espiritual.
La enseñanza de estas prácticas es una cosa; la identificación con ella como parte «del ministerio de sanación de Jesús» es otra. Era Jesús quien «declaró limpios todos los alimentos» (Mr 7:19), y comió pescado en su cuerpo resucitado (Lucas 24:41-43).
Es más, fue Jesús el que recibió la furia del liderazgo judío por no observar las leyes del šabbat, y dijo que Dios era Su Propio Padre (Jn 5:18). De hecho, Jesús dijo a la mujer samaritana en el pozo que la verdadera adoración no tenía que ver con los lugares santos (ni los tiempos, porque las cosas creadas no son sagradas) pero «los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque también el Padre tales adoradores busca que lo adoren» (Jn 4:21-24).
El ministerio de sanación de Jesús era Su declaración de que Él era el Mesías, mientras cumplió las profecías de que Él haría a los mudos hablar, a los ciegos ver, a los cojos andar, y a los muertos resucitar. Él enseñó que la obra de Dios era que la gente creyera «en aquel que él ha enviado» (Jn 6:29).
«El ministerio de sanación» de Loma Linda no es el ministerio de Jesús; es el mensaje de salud adventista.—Colleen Tinker